jueves, 31 de diciembre de 2009

Propósitos de año nuevo (o más + menos = mejor)

Con el año nuevo llegan los propósitos que muchos se hacen y pocos cumplen. Curiosamente casi todos tienen que ver con el menos –comida, gasto – o con el más – deporte, ahorro –, cuando no con el conjunto vacío –fumar –. El más y el menos se suman para obtener el mejor: mejor cuerpo, mejor cuenta corriente, una vida mejor, en suma.
A buen seguro los gimnasios (sobre todo los municipales, pues hay crisis y son más baratos) se llenarán durante los primeros días de enero para luego vaciarse y volver a llenarse de nuevo y de manera efímera con la operación bikini; la gente empezará a hacer dietas que abandonará cuando sus estómagos acostumbrados al más se subleven por esa repentina condena al menos; y los parque urbanos serán invadidos por una especie en peligro de extinción, los nuevos corredores, condenada a la desaparición al cabo de unas semanas según los cálculos más optimistas.
Yo, como no podía ser menos, también me he hecho mi propósito para el 2010, que tiene que ver con el menos pero también con el más: no comprar ningún libro durante los próximos 365 días a no ser que sea absolutamente necesario e ineludible.
Y reflejar aquí las consecuencias, por supuesto.
¡Feliz año (con propósitos o no) a todos!